El inicio de un nuevo año es un buen momento para cuidarse y encender motores con energías renovadas. El Dr. John Upledger, creador de la Terapia Craneosacral, ideó un protocolo de 10 pasos con efectos globales sobre todo el cuerpo. Su aplicación como forma de prevención, puesta a punto, preparación y reparación es único.
Hoy te lo recomendamos especialmente para empezar esta nueva etapa con la mejor condición física, la mente despejada y las emociones en equilibrio.
Beneficios del protocolo de 10 pasos
El objetivo de los 10 pasos es es asegurar que los efectos lleguen a todo el cuerpo, equilibrando y devolviendo la vitalidad a la persona en su totalidad.
Gracias a que actúa en las principales unidades estructurales del cuerpo, una sesión con el protocolo de 10 pasos ayuda a, entre otros:
- Devolver la vitalidad y el bienestar general
- Mejorar la circulación
- Regular la función digestiva
- Eliminar tensiones y dolores musculares, óseos y articulares
- Estimular el sistema endocrino
- Prevenir lesiones, restricciones y deficiencias físicas
- Reforzar el sistema inmunológico
- Relajar y reducir el estrés
- Equilibrar las emociones
- Aclarar la mente
- Eliminar bloqueos energéticos
- Etc.
El efecto es un estado de bienestar general que se traduce en una mayor capacidad de trabajo y disfrute, a la vez que mejora el descanso y la regeneración celular.
Optimizando nuestros recursos físicos, mentales y emocionales
Acabamos de pasar unas semanas de fiestas, buena compañía (o no 😉 ), familia, viajes… pero muchas veces también de cambios alimentarios y de sueño, de malabares teniendo a los pequeñ@s de vacaciones en casa, los excesos económicos, nuevos propósitos que parecen inalcanzables, etc.
Sumémosle la vuelta al trabajo y las obligaciones, la sensación de cansancio y mal humor al empezar la semana y temblando ante la perspectiva del cargo de la tarjeta. Efectivamente, la famosa «cuesta de enero» puede hacerse una montaña insalvable.
Estas situaciones y muchas otras que puedan surgir serán mucho más llevaderas si antes hemos puesto nuestro cuerpo a punto con el tratamiento que te proponemos. Por sus efectos sobre el sistema nervioso, hormonal y endocrino, el Protocolo de 10 pasos mejora la capacidad cognitiva, ayudando a que nuestra mente esté despejada y preparada. A nivel emocional y mental también notarás los beneficios ya que te sentirás relajad@, menos irritable y con una sensación general de bienestar. Además, ocasionalmente puede ayudarte a resolver algún conflicto pendiente.
¿Cómo es el proceso?
La duración aproximada del protocolo es de una hora.
- Se empieza realizando una primera toma de contacto para valorar el estado general a través del movimiento respiratorio primario (MRP) y así detectar posibles tensiones, desequilibrios y las zonas del cuerpo que puedan necesitar un reajuste.
- A partir de ahí se hace un barrido de todo el cuerpo. Se empieza por tratar el área de la pelvis, el diafragma, la zona torácica y cervical.
- El siguiente paso es profundizar en el cráneo, evaluando paso a paso cada uno de los huesos y sus articulaciones para devolverles su movimiento y posición si estos estuvieran alterados.
- A continuación hacemos lo mismo con el tubo dural (porción de las membranas meníngeas que va desde el occipital, en la base del cráneo, hasta el sacro).
- Para finalizar, y después del trabajo realizado valoramos el resultado final a través de una escucha global del organismo.
Todo el proceso se realiza de forma suave, sin manipulaciones bruscas ni molestas y respetando los tiempos de la persona y su cuerpo.
Como ves, chequear, corregir y equilibrar tu organismo puede aportarte la frescura y dinamismo que necesitas para aligerar cuerpo, mente y ánimo, lo que se traduce en un viaje por este nuevo año más placentero y «aprovechable».