Inhalar… exhalar, inhalar… exhalar, inhalar… exhalar, y así 16 veces por minuto, casi 1.000 cada hora y entre 23 o 24.000 inhalaciones y exhalaciones al día. Un gesto automático que dejamos exclusivamente en “manos” del diafragma. Simplemente nos olvidamos del proceso mientras nos dedicamos a nuestras actividades, a vivir sin tener en cuenta que esa vida, a la que le dedicamos todo el tiempo, depende directamente de la respiración; si no hay oxigenación no hay vida. El deterioro de la calidad de esta función fisiológica puede comprometer, a veces muy seriamente, nuestra salud y bienestar.
La pérdida de consciencia de la propia respiración, muy frecuente entre la mayoría de la población, permite que gradualmente vayamos respirando cada vez de forma más incorrecta, superficial, deficiente… Sin darnos cuenta vamos retirando poco a poco el aporte de oxígeno necesario para mantener una salud óptima. Las articulaciones costales y musculatura asociada a la respiración pierden elasticidad. La piel, los órganos, las vísceras… todo el sistema envejece.
Oxigénate
Inhalar… exhalar… tan simple como prestar atención en diferentes momentos del día. Respirar conscientemente y, durante unos minutos, pasar del “piloto automático” a la respiración voluntaria, alargando cada inspiración y procurando un vaciado más completo del aire de tus pulmones. Inhalar… exhalar… más lento, más largo, más suave…
Lo mejor es iniciar y acabar el día practicando unos minutos de respiración consciente y, durante la jornada, aparcar momentáneamente cualquier actividad para centrarte únicamente en tu aporte vital, igual que paras unos momentos para descansar o tomar un vaso de agua. Pero también lo puedes hacer mientras paseas al perro, lavas los platos o lees este artículo.
Beneficios
- Ayuda a desintoxicar el cuerpo
- Fortalece los órganos y facilita sus funciones
- Combate la rigidez de las articulaciones y la musculatura
- Libera la presión del pecho
- Aumenta la capacidad torácica y pulmonar
- Masajea las vísceras
- Despeja la mente y favorece el desarrollo de la inteligencia
- Reduce la ansiedad, el estrés, el insomnio, la dispersión, la depresión, el envejecimiento y deterioro físico y mental (cerebro, órganos, vísceras, piel, huesos, músculos, tejidos…)
- Favorece la regeneración celular
- Potencia la memoria y la capacidad de concentración
- Refuerza el sistema inmunitario
- Fortalece y da energía
- Revitaliza la salud general
Respiración a la carta
El propósito de conducirla cada dia durante unos minutos es tomar un aporte diario de oxígeno extra y movilizar todas las estructuras que participan en una respiración correcta. Esto, a su vez, contribuye a restablecer la respiración saludable que perdimos por el camino para que, con el tiempo, lo hagamos mejor de forma espontánea. Hay una gran variedad de formas de respirar con las que puedes “jugar” para ir tomando consciencia y fomentar el hábito de una buena respiración. Algunos ejemplos sencillos, escoge alguno de ellos o combínalos entre si:
• Respira normal pero con una respiración más larga, más completa y más profunda como señalábamos en los párrafos anteriores.
• Alterna entre respiración abdominal (sacando barriga) y torácica (sacando pecho).
• Deja que el aire inunde tus pulmones dilatando primero tu pecho mientras desciende hasta el abdomen. Exhala haciendo el recorrido inverso, vaciando desde el vientre hasta las clavículas.
• Inhala y exhala poniendo las manos primero en tus caderas, luego sobre las costillas flotantes y, para acabar, sobre las clavículas. El tacto focaliza la atención y hace que tu respiración se extienda más en esa zona.
Si nada te lo impide, respira siempre por la nariz (a diferencia de otros ejercicios específicos) y preferiblemente al aire libre o cerca de una ventana abierta que dé a la calle.
Ejercicio meditación/respiración de VoxCorpore
La mejor propuesta es dedicar un espacio diario al ejercicio de 8 minutos de respiración/meditación que aparece a continuación. Te sugerimos que lo hagas cada noche antes de sentarte a cenar. Los testimonios que hemos recogido señalan que es la manera más fácil de integrarlo en la vida diaria sin que se desvanezca el propósito de hacerlo entre las miles de actividades y excusas en las que andamos inmers@s.
Si te sientes como si llevases un peso en el pecho, una faja alrededor del tórax que te comprime o si a pesar de llevar algunos días practicando notas que te sigue costando hacer inhalaciones generosas, es posible que la musculatura asociada esté ya muy rígida y necesite la ayuda de un/a profesional para recuperar su calidad. Desde VoxCorpore recomendamos la Terapia Craneosacral y la Técnica de Liberación de Membranas para disolver esta limitación.
Conduce y reeduca tu respiración y notarás como en menos de un mes tu mente funciona más fresca y despierta, tu ánimo mejora y todo tu cuerpo te lo agradece.